La higiene personal y la educación física van muy ligadas ya que en nuestra asignatura la actividad física nos hace sudar, caer al suelo y ensuciarte,...
La ducha diaria y otros hábitos higiénicos se consideran indispensables para evitar el mal olor corporal y posibles infecciones. Tanto padres como maestros deben hacer llegar a los niños la importancia que tiene el asearse después de la práctica deportiva. El aseo después de clase se tiene que convertir en un hábito que, ya desde el primer ciclo, forme parte de la práctica habitual en cada una de las sesiones de educación física.
Acciones muy básicas tienen que formar parte de la dinámica de la asignatura: lavarse bien las manos, cara y axilas con agua y jabón o en su defecto con toallitas húmedas; secarse y cambiarse de camiseta, peinarse sin compartir peine con los compañeros y echarse colonia. Lo ideal sería poder ducharse después de cada sesión pero por razones de tiempo se hace totalmente inviable.
José cuanto tiempo tardarías en subir cosas a su blog cuando usted suba cosas a su blog
ResponderEliminarHola soy zamara de 6°B apruebame
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